ESCRIBO

SUSPIROS ESTIVAIS

-Alberto Valle Vázquez 4º ESO-

Eu quería vivir libre

coma os heroes dos libros.

Mellor garda as túas libras,

quédome cos meus amigos.

Os meus amigos de clase,

os de sempre e deste curso.

(que durou nove minutos,

dende setembro ata xuño)

Esta regueifa a forxo

en nome de min e todos,

con anaquiños de soños

e recordos do que fomos.

Capuchita Roja (Caperucita Roja 2016)

-Adrián Gómez Martínez 1º ESO-

Érase una vez, una niña de diez años que vivía con su madre, ama de casa; y su padre, parado desde tiempos inmemorables. Cada semana, su madre le daba una bolsa del Mercadona llena de comida y Coca – Cola para que se la llevase a su abuela.

Un día que le iba a llevar la bolsa, bajó de su casa en ascensor, pues vivía en un 7º piso y, había que tener unas piernas de atleta y unos globos por pulmones para subir o bajar ese recorrido por las escaleras. Ella se dirigió a la parada del autobús y esperó al C3 mientras jugaba al Clash Of Clans. Cuando llegó el bus, pago los 1´32 € y se puso en uno de los asientos altos para ir viendo por la ventanilla mientras oía música desde Spotify. Al llegar a la mitad del recorrido, un cani se le acercó a pedirle un “leuro” y ya de paso le propuso una apuesta : 

-A ver quién llega antes a casa de tu abuelita, yo desde la 4ª parada o tú desde la 3ª.

Caperucita aceptó. Cuando bajó del autobús, le mandó a su abuela un Whatsapp que decía :”Abuela, stoy yendo a tu keli, prepárame un Colacao con unas Oreo y no seas tacaña y no me vuelvas a poner de las de marca Hacendado, k saben a harina. Y si mi madre t pregunta xq no llego a la hora, le dices spezifikmente: ”io k se no soi 100tifiko y pa ke kieres saber eso jaja salu2” ;P”.

Cuando llegó a la casa de la abuela, descubrió al cani de hacía unos minutos amenazando a su abuela con una navaja. Caperucita llamó al 091 para que viniese la policía. Ella lo entretuvo enseñándole sus fotos de Instagram en su cuenta @kaperushitta_loka_22 y también todos sus “followers” en Twitter. Cuando llegó la policía, se llevaron al maleante y le quitaron todas sus “cadenicas toas flamas” y le prohibieron sacarse “selfies” en el espejo.

SUSURRANDO AL RELÁMPAGO ERRÓNEO

-Alberto Valle Vázquez 4º ESO-

Podéis leer mis escritos en : https://www.wattpad.com/user/ValleFreeway

    Soy un error errante que va en rumbo a su perdición. 

    Soy el que ralló al rayo para no rallarme yo. 

    Soy el que rompió las piedras del trayecto y aprendió a prender la llama de su corazón, y con razón el fuego abrasó todo lo que a su paso encontró. 

    Soy el que pide perdón más de lo debido, una sístole ardiente por cada latido, prefiero no dar las gracias y ser agradecido, y pienso que la vida es bella mientras se le siga el ritmo.

    Soy el que agradece las sonrisas radiantes y el ruido de mi risa cuando estoy triste o perdido, eso es mágico, pero la magia acaba por ser truco, y eso es trágico; la vida te rompe y se quiebra sin ningún preámbulo, y este lunático tras perder su cordura vaga errático por parajes donde el paisaje siempre es estático en busca de la llama que perdió por tanto pálpito imaginario, debido a un dolor tenor provocado por un amor sin ardor, tóxico y sarcástico. 

    Soy el preso por el pánico de solo verte en fotos, los sicarios de tus labios dejaron los míos rotos, y ahora trozos de mi ser rondan el infierno, porque tú, el frío y el invierno los destrozasteis al máximo. Pero la primavera arrancó la costra del invierno, miró por mi y mis heridas, y curó mi sufrimiento; trajo las flores y el aire de olores, y con ello el esperpento de mi alma tomó importancia con el crecimiento de la gracia ante el frescor del momento. 

    Soy al que tu mirar remata y al que el brillo de tus ojos revive. 

    Soy el que sabe de lo que habla solamente cuando escribe; escribí sobre una eternidad a tu vera que no va ser posible porque por llorar encima de mi libreta ahora la letra es ilegible. 

    Soy el que pasa otro rato frente al cuaderno para no ser tan irascible, que sabe que a ciencia cierta que los sueños no son inservibles, sino el combustible que hace que nuestra tierra gire. 

    Soy el perro verde que no muerde, que aprende errores con esperanza de que la flor de la vida no se marchite, que solo quiere ser libre, y estar libre de lamento; que entiende que lo importante no es cuánto tiempo estemos aquí, sino lo que conseguimos hacer en ese tiempo.... creo que es eso que llaman vivir. 

    Soy el que susurra a la brisa para que llega a tu cornisa mi premisa de amor sin prisa y de amar tu sonrisa.

    Soy el que a veces acaricia as su ira para amaestrarla y que nos traspase la barrera de la justicia, y el que en ocasiones le prende fuego para que rompa todo molde social que pretende crear clones presos del consumo y de la avaricia.

    Soy el que traspasa murallas por conseguir mis metas  y dejarlas cumplidas.

    Soy mis palabras, soy mi saliva, soy yo mismo en definitiva.